Cuando comienzas una nueva vida fuera de tu país de origen, empezarás muy seguramente a ampliar tu grupo de amigos. Conocerás a otros migrantes como tú, por lo que debes procurar que te sumen y puedan ser personas que te inspiren y alienten.
Te describimos los 8 tipos de migrantes que debes tener cerca:
- El honesto: Es correcto en su actuar y proceder. Habla con la verdad, siempre busca soluciones por la vía legal. Es de aquellos que devuelve lo que se encontró. Es alérgico a las estafas y toda forma de perjudicar al otro.
- El que le echa piernas a todo: Tiene un doctorado en la Nasa, pero eso no le impide medirse a cualquier empleo: de mesero, vendedor, asistente, no importa, porque sabe que lo importante es arrancar con algo y luego ir escalando según sus aptitudes.
- El emprendedor: Es curioso, toma riesgos y ve negocios y oportunidades donde otros ven crisis. Aprovecha el tiempo para ir a charlas y talleres gratuitos sobre emprendimiento, negocios, ventas, etc. Si tiene algún ingreso, lo invierte en algo para sacarle ganancia.
- El ‘Yokoy Kenji’: Así como este famoso motivador colombiano, este migrante siempre tiene algo bueno que aconsejarte, te anima, te da fuerzas para continuar. Gracias a su palabra y sus experiencias, te deja una gran enseñanza. Regala abrazos y cumplidos.
- El actualizado: Siempre está al día con lo que sucede en el país. Parece un portal de noticias. Entiende las normas migratorias, la economía y cómo se mueve el país al que emigró.
- El de los contactos: En resumen, conoce a titirimundi y sabe con quién enlazarte cuando necesitas ayuda, orientación o asesoría. Tiene influencia y es un especialista no titulado en relaciones públicas. Siempre tiene un plan al que invitarte y busca integrarse a cada lugar que llega.
- El pan dulce: tiene un corazón de azúcar. Hace voluntariado, le gustan las mascotas, por donde camina va recogiendo cualquier envase y lo deja en la basura. Habla bien del país que lo acogió y de su propio país. Se siente agradecido con lo que es y tiene.
- El enfocado: Es buena paga. Prefiere dejar de comer antes que dejarte de pagar los 10 mil pesos que le prestaste hasta que llegara la quincena. Por lo general, lleva un control de sus gastos y sabe en qué gastar y en qué no.